Hacer tu propia sal con vidrio puede que sea algo que nunca hayas considerado, pero es un proceso increíblemente sencillo. Not Without Salt es un blog dedicado a todo lo salado, y proporcionan unos pasos muy sencillos que cualquiera puede seguir para crear su propia sal.
Primero necesitas reunir sal del mar – las botellas de vidrio son ideales para este propósito. Cuando llegues a casa, filtra el agua a través de al menos 4 capas de muselina fina o un trapo de algodón para quitar las impurezas. Obtendrás agua limpia (¡aunque salada!)
Hierve el agua hasta que se evapore. Para ahorrar energía, también puedes colocar el líquido en un recipiente grande y profundo. Ponlo en un lugar soleado y deja que el agua se evapore de forma natural. Tardará más, pero tus cristales de sal serán más grandes. Una vez que todo el agua se haya evaporado, tienes sal lista para usar. Consérvala en envases de vidrio sellados y utilízala cuando la necesites.