Por todo el mundo, fabricantes de envases están intentando desesperadamente imitar al vidrio. Algunos incluso dicen que “parece vidrio” en un esfuerzo de enfatizar la imagen positiva que tiene el consumidor hacia el envase de vidrio. Algunos proclaman ser revolucionarios porque se pueden volver a cerrar…quizás no hayan oído hablar de los tarros de vidrio con tapa.
Muchos fabricantes promueven el hecho de que su envase es más ligero que el vidrio para hacer declaraciones extraordinarias sobre su comportamiento ambiental. Pero como recalca Lucy Siegle en un reciente artículo para The Observer, más ligero no siempre significa mejor “los tarros de plástico PET producen cinco veces más gases de efecto invernadero que el vidrio”. También utilizan el doble de materiales no-renovables como minerales y combustibles fósiles, y 17 veces más cantidad de agua.
Los materiales que compiten contra el vidrio también ignoran el hecho de que la mayoría de los envases de vidrio en Europa se fabrican con vidrio reciclado. Todo vidrio puede ser reciclado. En todo el continente, la media del reciclaje del vidrio alcanza el 71% con cifras por encima del 90% en algunos países. Esto ahorra alrededor de 7 millones de toneladas de CO2 cada año – equivalente a retirar 4 millones de coches de las calles. Al reciclar tan solo una botella ahorras suficiente energía para mantener encendida una televisión durante 20 minutos.
Al contrario, otros materiales de envase no pueden reciclarse de nuevo. En lugar de eso se tiran a incineradoras. Un informe de 2011 de Chloé Hecketsweiler informa que tan solo el 20% de los envases de plástico vendidos en Francia llegan a los centros de reciclado. De los demás, muchos terminan en el océano y ríos donde producen un efecto devastador en los peces, aves y animales que dependen de la vida marina para su comida.
Otra área donde el vidrio destaca sobre otros materiales es la salud. El vidrio se fabrica con 3 materias primas naturales que se encuentran abundantemente en la naturaleza: arena de sílice, carbonato de sodio y caliza. Contrariamente a otros materiales que contienen aceites y sustancias químicas que pueden afectar al contenido del envase.
Nos halaga que los fabricantes de otros envases nos quieran imitar, pero nada puede reemplazar al vidrio. Después de todo, es bueno para la economía, bueno para el medio ambiente ¡y bueno para ti!